viernes, 16 de noviembre de 2007

DÍA 5 --- EILEAN DONAN CASTLE - ISLA DE SKYE



A pesar del cansancio que día a día nos iba haciendo mella, esa noche no dormimos muy bien y no fue en ningún caso por que la cama fuera incómoda . Yo me tuve que levantar en un par de ocasiones a poner una toalla en la ventana ya que, en las casas escocesas es muy raro ver persianas o cortinas, si acaso un fino visillo apenas evita que se filtre la claridad.

La primera vez que me levanté, estaba amaneciendo y miré incrédulo mi reloj. ¿Cómorl? Las 5 de la madrugada.... ¿y ya era de día?
Pues sí amigos. En esa época del año y a esas latitudes, las noches no superan las 5 horas así que, si teneis pensado ir a Escocia en Junio y sois medio vampiros como yo, mejor que os lleveis un antifaz si quereis dormir a pierna suelta.

Medio desvelados por culpa de la toalla que no hacía más que caerse, a las 7 y media ya estábamos en pie, vestidos, duchados y dispuestos a zamparnos nuestro 4º desayuno escocés, acompañado de unos huevos fritos tan perfectos, que parecían de juguete.


Terminaba así nuestra estancia en aquel acogedor bed and breakfast llamado Bannerman, donde una vez más nos trataron de maravilla.
El precio por dos noches, 110 libras. Una relación calidad/precio excelente.


Tras despedirnos de la dueña y de su perro Hugo, metimos el equipaje en el coche para emprender rumbo hacia la isla de Skye.
Teniendo en cuenta que también se le conoce como la isla de la niebla, nos temimos lo peor al ver lo nublado que había vuelto a amanecer el día.


Pero antes de dejar Inverness, tuvimos la ocasión de comprobar una vez más la gentileza de los escoceses al entrar en una tienda de informática y pedir que nos pasaran las fotos de las tarjetas a un pen drive que nos habíamos llevado.
El chaval que nos atendió, aparte de tomarse la molestia de copiarnos las fotos (que eran muchísimas) y contarnos cositas interesantes sobre Inverness, no quiso cobrarnos nada. De nada valió insistir, así que estés donde estés, muchas gracias amiguete.


Para ir hasta Skye sin renunciar a nuestra visita al Eilean Donan Castle, nos vimos obligados a tomar de nuevo la A82.
El día anterior ya nos habíamos dado una buena ración de lago Ness, así que esta vez prestamos más atención al lado derecho de la carretera.
En una de nuestras paradas decidimos adentrarnos en la espesura del bosque donde casi por casualidad, nos encontramos con esta impresionante cascada, una de las varias que alimentan a Loch Ness con sus belicosas aguas.


Fue la única parada que hicimos hasta llegar a las proximidades de las Five Sisters, una pequeña cordillera con cinco montañas predominantes y muy similares entre sí. De ahí el curioso nombre de las cinco hermanas.


Lo de la altura de las montañas es uno de los efectos ópticos más singulares de Escocia . Al arrancar de suelo llano y hacerlo desde practicamente el nivel del mar, da la impresión de que todas las montañas son altísimas, cuando rara vez superan los 1.000 metros. Tal vez en el vídeo os podeis hacer una mejor idea.




Las montañas que rebasan los 900 metros se conocen como munros y según dicen, uno no puede marcharse de Escocia sin haber coronado al menos uno de ellos.
Nosotros no quisimos ser menos, aunque al final solo nos quedamos en el intento. O tal vez no.
¿Este conato de munro no cuenta?


Hay casi 290 munros desperdigados por toda Escocia y peregrinar a ellos es uno de los pasatiempos preferidos de los escoceses. Incluso nos contaron que hay una pequeña élite de senderistas que se vanaglorian de haberlos subido todos.
La verdad es que las vistas desde ahí arriba deben ser impresionantes.


Tan impresionante como la enorme brecha que divide este munro llamado The Saddle (la silla de montar), por donde no paran de bajar enormes torrentes de agua.



Ya faltaba poco para llegar a nuestro primer destino del día pero antes Mari Carmen quiso dar rienda suelta a su insólito complejo de Maria Antonieta a punto de ser guillotinada, sacando su cabeza por el techo solar del coche y filmando esta panorámica del lago Duich y las Five Sisters.







A las 12 de la mañana, habíamos llegado al Eilean Donan Castle, una fortaleza que empezó a construirse en el año 1220, siendo escenario de innumerables batallas que lo dejaron en ruinas hasta que en 1912, un ricachón escocés del clan McRae decidió comprarlo y restaurarlo.

Al igual que torre Eiffel de París o la pirámide de Keops en Egipto, puede que este sea el lugar más emblemático (al menos el más fotografiado) de toda Escocia.
Si además hace un sol tan radiante como el que apareció a media mañana, su imagen reflejada en el agua lo convierte en una especie de lugar hipnótico que consigue que no te canses de mirarle.


Aparte de su belleza natural y su idílico emplazamiento en el lago Duich, el Eilean Donan Castle se ha hecho famoso por servir de escenario para una buena colección de películas. Entre las más conocidas están "Los Inmortales" (Highlander) o "El Mundo Nunca es Suficiente" de 007.


No lo hemos dicho hasta ahora, pero en cualquier oficina de turismo y por solo 15 libras, se puede adquirir un bono que permite visitar gratis un sinfín de castillos y monumentos oficiales. Al final sale rentable, aunque para el Eilean Donan Castle no sirve.
La entrada cuesta 7 libras, pero son muy pocos los que se resisten al magnetismo del castillo, aunque solo sea por cruzar el mítico puente en el que tantos personajes ilustres han dejado su huella.





El interior del castillo está decorado con un gusto exquisito y está repleto de figuras a tamaño natural que hacen más real la sensación de haber viajado hacia atrás en el tiempo.

Tampoco estaba permitido hacer fotos del interior, aunque hartos de ser tan sumamente cívicos, decidimos transgredir un poco la ley.



Para no ser delatados por el flash, solo tuvimos que desactivarlo y poner la cámara en modo ISO-400 con unos resultados más que aceptables. Ay si lo llegamos a saber antes!!!




















Como podeis ver en las fotos, todo está cuidado al máximo detalle. Las descripciones de cada rincón del castillo estan repartidas en folletos en varios idiomas y muy bien explicadas. Si a todo eso le sumamos sus románticas vistas al lago desde el interior, la visita al Eilean Donan se convierte en inexcusable.



A la 1 y media de la tarde reemprendimos la marcha hacia la isla de Skye, cuyo único acceso por carretera se encuentra en la localidad de Kyle Of Lochalsh, donde hay que atravesar un impresionante puente curvado llamado (como no podía ser de otra forma) Skye Bridge.


La primera toma de contacto con Skye no es todo lo espectacular que uno espera, pero solo basta adentrarse unas cuantas millas para empezar a comprender el por qué la isla consigue enamorar a tanta gente.
Skye está repleta de paisajes cambiantes y es muy gratificante ver como después de cada curva, te espera una sorpresa diferente. A veces hay sol, a veces no. En ocasiones predomina el color verde y en otras la vegetación es practicamente nula.
Una de las cosas que más impactan es la sensación de quietud, solo rota en ocasiones por los cazas Tornado de la Royal Air Force Británica que rasgan el cielo con su ensordecedor vuelo rasante.



Teníamos intención de recorrer la isla de cabo a rabo, pero enseguida nos dimos cuenta de que iba a ser una misión imposible por varias razones.
La primera es que el tamaño de la isla es muy engañoso y hay tantas cosas que ver que literalmente, no da tiempo.
La otra razón son las angostas carreteras y la multitud de ganado suelto que hay que ir esquivando. Esto ralentiza bastante la marcha.
Exceptuando la ruta principal que conduce a Portree (única "ciudad" de la isla), el 90% de las carreteras en Skye son de un solo carril para los dos sentidos y hay que estar parando constantemente en los passing place, donde uno acaba con la mano dormida de tanto saludar al conductor que cede el paso.
Esto, que puede resultar tedioso, se entiende mejor cuando miras alrededor y haces comunión con el entorno. Entonces comprendes que debe ser así, que debe mantenerse cierto equilibrio para que este tesoro natural no se contamine.
Y por eso, no es de extrañar que las cabras sean tan felices allí.


Decidimos bordear la península de Trotternish, que es una de las zonas más agrestes de Skye y al mismo tiempo una de las que más atractivos ofrecen.
Empezamos recorriendo la costa oeste hasta llegar a Uig, un pequeño pueblo costero muy famoso por su cerámica, donde paramos a comer. De allí salen los ferrys con destino a las Hébridas Exteriores.











Unas millas más adelante, dimos un paseo por el desangelado puerto de Kilmuir comprobando que los pueblos en la isla de Skye, más que pueblos son mosaicos de pequeñas granjas o crofts muy distantes una de otra.










Muy cerca de Kilmuir se encuentra el Skye Museum of Island Life, un pequeño poblado con casas de estilo celta, construidas en piedra y con techos de paja. A pesar de que el acceso al interior de las mismas se encontraba cerrado (ya sabeis, eran más de las 5), pudimos pasar a recorrer el recinto sin ningún problema.


Junto al mismo, se encuentra un pequeño cementerio con unas evocadoras vistas al infinito océano donde reposan los restos del Flora McDonald, famosa por protagonizar un sonado romance con el entonces aspirante al trono Bonnie Prince Charlie, al que consiguió salvar de la horca ocultándole en su casa.
Mira que maja la muchacha.


Este es el punto más septentrional de toda la isla y a partir de aquí la carretera empeora todavía más, serpenteando paralela a la costa en un suave, pero peligroso descenso.



Hay que conducir con mucho tacto si no quieres perderte deliciosos panoramas, como éste que hay en las cercanías de Staffin.


La indómita isla de Skye, tan perversa y caprichosa con el clima, nos estaba brindando un día de sol totalmente inesperado, cosa que agradecimos ya que de lo contrario hubiera sido muy difícil distinguir entre sus perpetuas nieblas el Old Man of Storr, un impresionante monolito de basalto que se alza exultante con sus 55 metros de altura.



Este es uno de los tesoros naturales más representativos de Skye junto a otras maravillas como Kilt Rock, que desgraciadamente nos pasamos de largo.
Aquí tenemos el video correspondiente a el Viejo de Storr, un extenso documental de 20 segundos.





Tras pasar largo rato paralizados ante la belleza de aquellas agujas rocosas, decidimos seguir inyectándonos kilómetros y bajar hasta el extremo sur de la isla, concretamente hasta un lugar llamado Elgol con el fin de contemplar las Cuillins, una cordillera atípica en Escocia por la forma ahusada de sus picos que recordaba en cierto modo a las tenebrosas montañas que aparecen en el Señor de los Anillos.



A simple vista en el GPS, parecía estar cerca pero tardamos más de una hora en recorrer 40 millas que nos parecieron eternas.
Aparte de las Cuillins en la distancia, solo vimos ovejas y cabras. No había nada más en Elgol.
Elgol el que nos metieron a nosotros, jajajajaja. Pero siguió mereciendo la pena.
Ese día el clima estaba bastante apacible, pero viendo la inclinación de estos árboles nos pudimos hacer una clara idea de como deben ser allí los días de viento.
Seguro que hasta los coches llevan ancla.


En algún lugar de Internet, recuerdo haber leido a alguien que describía (de manera muy acertada por cierto), la experiencia de recorrer Escocia como: "estar viviendo en una maqueta del Ibertren".
Nosotros tuvimos la misma sensación durante muchas veces, pero nunca tan intensa cuando de regreso a Portree, nos encontramos con este espectacular paisaje de mar y montaña.
Era lo más parecido a una postal viviente que había visto en mi vida.


Tras otra hora de conducción temeraria (forzosa) y un sinfín de saludos a los demás conductores, llegamos a Portree con la intención de cenar allí. Nos habían dicho que era uno de los sitios donde mejor marisco se comía DEL MUNDO. Pero claro, por enésima vez la luz solar volvió a engañarnos y a las diez de la noche, todo los restaurantes ya estaban cerrados.
Todos menos uno, aunque cuando vimos los precios, curiosamente se nos quitaron las ganas de marisco de repente.

Ya que estábamos allí no quisimos desperdiciar la ocasión de dar un fugaz paseo por la calle principal y las cercanías del puerto, albergando la esperanza de que algún centollo descarriado asomara la cabeza.


Al cabo de diez minutos ya habíamos llegado al otro extremo de Portree
Teniendo en cuenta que esta es la localidad más poblada de Skye, imaginaos como son las demás.
Desde allí pudimos contemplar con mejor detalle el encanto que ofrecían sus casitas de colores y las barcas varadas en la playa.
Era insufrible ver tantos paisajes bonitos. Llegaba a ser cruel. Alguien debía parar esto porque ya no podíamos con más.



Al final fué nuestro lugar de alojamiento quien terminó rompiendo el hechizo, ya que al llegar al hotel nos encontramos con una habitación un tanto cochambrosa, con una decoración horrenda y un cuarto de baño que parecía del siglo XIX.
Algo decepcionante para tratarse del hotel que más caro nos costó de todo el viaje (120 libras una sola noche), pero bueno había que ver el lado positivo.
Al menos tenía cortinas.


Una verdadera lástima ya que de puertas para afuera de la habitación, todo era maravilloso.
El Skeabost Hotel está enclavado en un sitio de ensueño a orillas del coqueto lago Snizort, rodeado de unos cuidadísimos jardines y campos de golf y con un aspecto exterior digno de un 5 estrellas.


Antes de irnos a dormir, quisimos dar un paseo por la parte trasera del hotel para bajar las rebanadas de pan con Nutella que habíamos cenado (otra vez) y como no, para contemplar la puesta de sol.
Nos hizo compañía un turista inglés muy majete que se encargó de recordarnos que era 21 de Junio, solsticio de verano y que por eso anochecía tan tarde.
Sé que cuesta creerlo pero eran casi las 12 de la noche cuando hicimos esta foto.


Sin lugar a dudas, uno de los crepúsuculos más largos y bonitos que jamás hemos visto. Incluso más que los atardeceres de los que disfrutamos casi a diario en nuestro Valle del Tiétar.... y eso ya es decir mucho.
Si no hubiera sido por las nubes de mosquitos que nos acosaban sin piedad, tal vez estaríamos hablando de uno de los momentos más románticos de toda nuestra vida.


8 comentarios:

Pili dijo...

Buenas:

Solo quiero deciros que vuestro blog es una currada y que os ha quedado fantástico. Yo fui a Escocia hace cinco años y ahora repito a finales de abril, por eso estoy buscando información de lo que no vi la otra vez. Vuestras descripciones y comentarios me están ayudando mucho.
¡Felicidades por vuestro trabajo!

Sir John More dijo...

Lo mismo digo. Soy un enamorado de Escocia, donde he estado ya en cuatro ocasiones, y en julio pensamos volver. Esta vez la isla de Skye no se nos escapa, pero estoy viendo que el alojamiento está regular... En fin, gracias por vuestro trabajo y por el gusto que reflejáis en él. Un saludo.

kid dijo...

Fantastico documento el de las tierras altas.Yo estuve el año pasado y me sentí un pequeño hombrecillo en una maqueta de Ibertren.Pero mi escrito va referente a la música que pones.Me gustaria saber quin es el cantante y el nombre e la cancion para poderla descargar de internet.Es fantastica.
Te dejo mi mail por si en algun momento me puedes pasar este dato.
kid39_4347@hotmail.com

Muchas gracias
Kid.

kid dijo...

Fantastico documento el de las tierras altas.Yo estuve el año pasado y me sentí un pequeño hombrecillo en una maqueta de Ibertren.Pero mi escrito va referente a la música que pones.Me gustaria saber quin es el cantante y el nombre e la cancion para poderla descargar de internet.Es fantastica.
Te dejo mi mail por si en algun momento me puedes pasar este dato.
kid39_4347@hotmail.com

Muchas gracias
Kid.

Unknown dijo...

Nosotros hemos pasado nuestra luna de miel en escocia,y e vuelto enamorado de todas las tierras de escocia.
Quizas de las fotos que tengo,te interese alguna.Si te interesa contacta conmigo por mail.
Pirotecnico85@gmail.com

Unknown dijo...

Estupendo diario y preciosas fotos, me voy tb a mitad de junio y tengo la duda del precio del palacio de Balmoral, sois los únicos que indicaís que es gratuito, puede ser que fuera así en el 2007 y ahora ya haya que pagar?

Verónica dijo...

Enhorabuena por vuestro blog. Es la primera vez que voy a Escocia y vuestras hazañas junto a mi guía de viaje son los dos únicos documentos que estoy utilizando para planificarlo. Espero tener tan buen viaje como el que tuvisteis vosotros.Un saludo!

rosita dijo...

este mes de agosto vamos a la isla de skye, sabeis como esta el alojamiento?? hay beds and breakfast? no encotramos nada!! estamos dejandolo todo a la suerte!!